La obesidad es una enfermedad multi-causal que incluye factores genéticos, metabólicos, endocrinológicos y ambientales, fruto de la interacción entre genotipo y medio ambiente, que afecta a un importante porcentaje de la población, de todas las edades, sexos y condiciones sociales. Su prevalencia va en aumento de forma alarmante en casi todas las sociedades. Por estas características es necesario que la obesidad sea tratada desde diferentes áreas.

Existen distintos grados de obesidad (Obesidad tipo I con un IMC 25-29.9, Obesidad tipo II con un IMC 35-39.9, Obesidad tipo III con un IMC mayor a 40).

En caso de que el paciente posea una obesidad mórbida u obesidad extrema (IMC ? 40 kg/m2) con fracasos repetidos en intentos previos de pérdida de peso por métodos convencionales es recomendable su evaluación como candidato para Cirugía Bariátrica y Metabólica, para lo cual es necesario un tratamiento previo y posterior a la misma con evaluación de un equipo multidisciplinario.

En dicho procedimiento el paciente realiza entrevistas con cada uno de los miembros del equipo tratante, entre los cuales es fundamental el área de Salud Mental. En dicha área especificamos el Rol del psicólogo Bariátrico.

 

1) Evaluación y seguimiento en fases pre y post quirúrgicas.

1.1. Fase pre-quirúrgica:

 

El rol del psicólogo en esta etapa es relevante ya que realiza psico-educación referida a los hábitos saludables necesarios de incorporar no solamente para poder acceder a la cirugía sino para mantener a largo plazo el resultado.

Asimismo evalúa la capacidad cognitiva para asimilar y responder a indicaciones del Equipo tratante, conciencia de enfermedad , grado de compromiso con el tratamiento y capacidad de responsabilizarse de efectos y consecuencias de su decisión por el tratamiento bariátrico.

En esta instancia el psicólogo bariátrico detecta y señala idealizaciones y expectativas no realistas del tratamiento bariátrico, pensamientos mágicos acerca de la cirugía e implicación subjetiva en los cambios propuestos.

Es fundamental que el psicólogo pueda realizar entrevistas indagando motivo de consulta,  motivación del paciente, historia de la obesidad, estilo de vida, contexto social y familiar del paciente, red de contención y apoyo, conducta con la comida.  Fundamentalmente, el psicólogo bariátrico detecta, evalúa y comunica función de la comida en la regulación de ansiedad e impulsos

En caso de que el paciente realice tratamiento externo con psicólogo o psiquiatra,  debe indagar el motivo de su consulta, respuesta a los tratamientos y mantener un contacto con el profesional tratante propiciando un intermcabio y tratamiento integral en base a los cambios de hábitos y actitudes que se propone para el paciente.

Es necesario que el psicólogo bariátrico cuente con información acerca de internaciones previas del paciente,  Intentos de suicidio y/o intentos de daño contra sí mismo o terceros.

Se conocen contraindicaciones absolutas y relativas para cirugía bariátrica que deben ser tenidas en cuenta a la hora de la evaluación.

Las contraindicaciones psicológicas relativas para cirugía bariátrica son: enfermedades psiquiátricas tales como depresión mayor, bulimia nerviosa; el abuso de sustancias tales como cocaína, anfetamina, morfina, o alcohol. En estos casos es recomendable, recibir un tratamiento previo y un seguimiento estricto en el postoperatorio. Con respecto a las contraindicaciones absolutas, estas son todas las enfermedades psiquiátricas que impidan cooperar y entender en forma global el tratamiento, tales como el trastorno de personalidad limítrofe, la esquizofrenia, o cualquier enfermedad psicótica crónica no controlada; pacientes con abuso o dependencia de alcohol y drogas no controlado. Para lo cual el psicólogo bariátrico realiza la detección y diagnóstico de psico-patologìas, diagnóstico diferencial de neurosis y psicosis, detección de psicosis activas con fenómenos elementales, diferenciación de grados de depresión y neurosis narcisistas,  fallas constitutivas en el esquema corporal, bulimia-anorexia con episodios compulsivos con imposibilidad de control.

Por otro lado realiza lo que se denomina psico-profilaxis quirúrgica, preparando emocionalmente al paciente para afrontar dicha cirugía propiciando la toma de conciencia que la misma tendrá consecuencias no solamente físicas sino también emocionales y sociales; posibilitando la reflexión de la decisión del paciente por el tratamiento bariátrico.

En esta etapa es importante también realizar entrevistas familiares, abordando ansiedad, miedos y diversas emociones en la trama familia, evaluando existencia,  grado de apoyo y acompañamiento de su entorno.

 

1.2. Fase post-quirúrgica:

 

En esta fase, dentro de la etapa inmediata posterior a la cirugía, el psicólogo bariátrico evalúa la posibilidad de realizar visitas en el centro de salud donde se intervino quirúrgicamente al paciente, a modo de contención para él y su familia que lo acompaña.

Una vez que se da de alta quirúrgica al paciente se continúa con el tratamiento de seguimiento post-quirúrgico mediante entrevistas individuales y/o grupales.

Es importante Informar al paciente regularidad de asistencia a controles en el tiempo post-quirúrgico a largo plazo para asegurar seguimiento de todo el Equipo para esto será necesario propiciar y alentar en el paciente la continuidad en las consultas con todos los integrantes del Equipo a largo plazo.

El psicólogo continúa trabajando en los hábitos saludables del paciente en esta etapa y su continuidad necesaria para evitar que el paciente regane peso

En esta etapa se realiza una evaluación de la adaptación a cambios post-quirúrgicos del paciente: Cambios en el esquema corporal, proceso de reconocimiento, dificultades y demoras en la asunción de su propia imagen corporal.

Los cambios en el  estado de ánimo son esperables, la relación con la comida, el volumen de las porciones, la calidad de la comida se ha modificado  para lo cual es necesaria una detección y diagnóstico de patologías psicológicas y trastornos de la conducta alimentaria que puedan re-aparecer o reforzarse durante el proceso de adaptación post-quirúrgico.

Evaluar e intervenir en grados de expectativas del paciente respecto al descenso de peso.

Respecto del Equipo tratante el psicólogo deberá Informar la evaluación y diagnóstico del paciente candidato para tratamiento bariátrico. Fundamentar y debatir la selección del paciente bariátrico desde la presencia de patologías psicológicas y posición subjetiva del paciente; indicar tratamiento adecuado para cada paciente de acuerdo a su evaluación psicológica, historia de vida y condiciones familiares y sociales. Dar a conocer al Equipo los tiempos necesarios para la preparación quirúrgica desde la perspectiva psicológica. Dar a conocer al Equipo el proceso de revisión de actitudes y cambios subjetivos del paciente durante el tratamiento.

Detectar e intervenir en fenómenos grupales del Equipo a los de fines de despejar obstáculos y facilitar la dinámica de trabajo del grupo